Salud-Enfermedad:
El concepto de salud según la Organización Mundial de la Salud tiene una definición concreta: “es el estado completo de bienestar físico, mental y social que tiene una persona, y no solamente la ausencia de enfermedades o afecciones”. (OMS, 1948, p.1).
La salud es un fenómeno multidimensional y multicausal que trasciende la competencia médica, relacionándose además con la biología, la psicología, con la economía y la política, en tanto que es de importancia individual y colectiva al mismo tiempo. Alcántara, Moreno, G. (2008).
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La salud es una compleja estructura de engranajes funcionando en forma armoniosa para tener buenos resultados.
• Para estar saludable no basta que tu cuerpo esté bien, si te sientes deprimido o triste.
• No basta sentirse feliz para estar saludable, si sufres de enfermedad crónica como la diabetes o la presión alta y no te controlas.
• La salud requiere equilibrio y cuando éste se rompe viene la enfermedad
Es imposible pensar en salud sin referirse a enfermedad: ambos forman un dúo inseparable, al cual se le denomina como proceso salud-enfermedad. Alcántara, Moreno, G. (2008)
La OMS define enfermedad como “alteración o desviación del estado fisiológico en una o varias partes del cuerpo, por causas en general conocidas, manifestada por síntomas y signos característicos y cuya evolución es más o menos previsible”.
Es decir que una enfermedad es un trastorno que puede ser de leve a grave en el funcionamiento normal de nuestro organismo. Generalmente los trastornos son por causas conocidas pero no es posible generalizar esta afirmación.
Salud Familiar:
Es en el ambiente familiar donde se establecen por primera vez las acciones y las decisiones en materia de salud y es donde se originan la cultura, los valores y las normas sociales que competen a la salud .
La familia es la unidad básica de la organización social donde se ponen en práctica las intervenciones preventivas, de promoción yde tratamiento, uando es necesario”. OMS/OPS
Cuando la familia participa en forma activa y toma acciones que promueven y protegen su propia salud, mejora la salud de todos sus miembros.
• Cuando los padres de un niño en gestación cuidan su condición oral, también están protegiendo la salud oral del niño que esperan.
• Cuando la familia consume frutas y vegetales, cuando se sientan a comer y compartir en familia, promueven la salud de todos sus miembros.
Salud del niño
El desarrollo saludable de los niños y las niñas, es de fundamental importancia; la capacidad de vivir en armonía en un mundo que cambia constantemente es indispensable para este desarrollo. (OMS, 1948)
La Unicef declara que “los niños y las niñas, tienen derecho a disfrutar del nivel más alto posible de salud (que incluye agua potable, una buena higiene y alimentación) y a recibir atención médica cuando están enfermos”, es decir que el derecho a la salud de un niño, contempla el conjunto de cuidados que los padres y familiares deben enseñar a los niños: hábitos de higiene (bañarse, lavarse los dientes, lavarse las manos, etc).
Salud y Enfermedad Oral:
La Salud contempla una relación de equilibrio entre el ser humano y el ambiente en donde se desenvuelve. Un estado bucal saludable facilita las relaciones sociales y actividades del desempeño diario como la acciones de tragar, masticar, estudiar, trabajar, hablar, inclusive una autoestima favorable. Entre las funciones sociales y de interacción del individuo, la boca y las estructuras que la conforman, posibilitan los gestos, lenguaje, sonrisa y además complementa la estética facial de las personas.
La OMS define la salud bucodental como la ausencia de dolor agudo o crónico, cáncer de boca o garganta, llagas bucales, defectos congénitos como labio leporino o paladar hendido, enfermedades periodontales (de las encías), caries dental, pérdida de dientes y otras enfermedades y trastornos que afectan a la boca y la cavidad bucal. OMS ( 1998).
El deterioro de la salud bucal puede afectar a otros sistemas y funciones de nuestro organismo: a nuestro corazón, al bebé en gestación, dificulta la alimentación en los niños y puede producir complicaciones de otras enfermedades pre-existentes, tales como la diabetes.Al adquirir conciencia de la importancia de mantener una adecuada salud bucal y prevenir las enfermedades bucales más frecuentes, estamos manteniendo la salud oral del bebé que se espera y previniendo la aparición de las enfermedades más frecuentes como la caries. En la fig 8 puedes apreciar una hermosa boca sana
Enfermedades Orales en los niños y Caries:
La caries dental constituye la enfermedad crónica más prevalente en niños (es decir más frecuente) y debido a su carácter crónico avanza con la edad, si no se hacen esfuerzos para controlarla. Escobar-Paucar, G., Puerta, G. S. R., Cortés, Á. M. F., Posada, Á. M. T., & Aguirre, J. F. C. (2010).
archivo personal. Caries pequeña
Archivo personal caries grande
La salud bucal puede verse alterada por diversas enfermedades, siendo la más común, la caries dental. Otras enfermedades menos frecuentes que afectan la salud oral de los niños son la gingivoestomatitis (enfermedad de las encías, bastante molesta y dolorosa, de origen viral), aftas y úlceras.
La caries es una enfermedad infecciosa y transmisible, ocasionada por muchos factores, (multifactorial): el primero de ellos es la presencia de la bacteria streptococcus mutans (S.M).
La presencia de la bacteria streptococcus mutans (S.M), se ve favorecida por la formación de una masa pegajosa, que se adhiere a los dientes y se llama placa o biofilme.
La placa o biofilme está formada por otras bacterias, los ácidos que producen éstas mismas bacterias, restos de comida y saliva, combinados en la boca. La bacteria (SM) inmersa en este biofilme o masa pegajosa es el principal causante de caries.
Como se observa en la fig 10. cuando empieza a ser visible se ve como una masa blanquecina que es posible retirar con la uña.
El segundo factor que contribuye al desarrollo de la caries es la dieta de los niños. Los carbohidratos fermentables (galletas, queques, pan, almidones, azúcares), son utilizados por la bacteria (SM) para producir ácidos y éstos ácidos, van provocando la destrucción del diente. Cuanto más frecuentemente se consuma el azúcar y carbohidratos fermentables, existe mayor probabilidad que se formen caries. Los azúcares están presentes en casi todos los alimentos, como por ejemplo en la leche, en los jugos de fruta, bebidas azucaradas y otros alimentos de sabor dulce, como también en forma enmascarada como preservante en alimentos manufacturados como por ejemplo en el ketchup, pan, alimentos de paquete, etc.
El tercer factor necesario para desarrollar la caries es que el niño sea susceptible y esto se debe a factores genéticos. Inclusive entre hermanos gemelos hay diferencias de susceptibilidad a la caries. Esto significa que en las mismas circunstancias de alimentación, limpieza y presencia de bacterias, hay niños que desarrollarán caries y otros no.
El cuarto y último factor es el tiempo. Con la presencia de los tres factores anteriores, lo único que hay que hacer es esperar, tarde o temprano aparecerán las caries.
Caries de la Temprana Infancia
La Caries de la Temprana Infancia, la cual llamaremos (CTI), es una forma severa y particular de caries. Su nombre se debe a que afecta los dientes temporales de los niños pequeños, lactantes y niños pre-escolares, afectando varios dientes y produciendo una rápida destrucción e infección del tejido dental (Horowitz, 1998).
En niños pequeños, este problema, además de ocasionar dolor e infección local, puede tener complicaciones en el estado de salud general, ya que niños con CTI pueden ver afectado su nutrición, por las dificultades que tienen para alimentarse debido al dolor o molestia que les provoca.
Cómo consecuencia del rápido daño oral, además de dolor, puede provocar problemas de salud general, problemas de autoestima, hospitalizaciones y urgencia debido a infecciones severas, lo que produce al menor y su familia una menor calidad de vida (Low et al., 1999; Sheller et al., 1997).
La caries de la temprana infancia, puede ser causada por usar “chupetas” empapadas en azúcares como la miel, o por tomar frecuentemente chupones con líquidos azucarados, como leches, jugos de fruta o bebidas. Especial importancia tiene el consumo de líquidos o bebidas, leche, leche de fórmula o leche materna (cuando ya los niños tienen dientes), durante la noche y madrugada, ya que la saliva que es un factor protector en la cavidad bucal (lubricación y presencia de elementos minerales) disminuye casi totalmente durante la noche, dejando los dientes a merced de los ácidos producidos por las bacterias al fermentar estos líquidos.
Algunos de los hábitos de alimentación más dañinos para la dentición temporal son:
1. Lavar los dientes y luego dar el chupón o el pecho para que el bebé se duerma
2. Dar leche materna o chupón con líquidos azúcarados (incluida la leche), cada vez que el bebé se despierta en la madrugada.
Bibliografía
Escobar-Paucar, G., Puerta, G. S. R., Cortés, Á. M. F., Posada, Á. M. T., & Aguirre, J. F. C. (2010). Experiencia de caries dental en niños de 1-5 años de bajos ingresos. Medellín. Colombia. CES Odontología, 22(1), 22-28. Recuperado de: http://revistas.ces.edu.co/index.php/odontologia/article/view/504/606
Horowitz, H. S. Research issues in early childhood caries. Community Dent. Oral Epidemiol., 26:67- 81, 1998. Recuperado de:
Zaror Sánchez, C., Pineda Toledo, P., & Orellana Cáceres, J. J. (2011). Prevalencia de caries temprana de la Infancia y sus factores asociados en niños chilenos de 2 y 4 años. International journal of odontostomatology, 5(2), 171-177. Recuperado de: http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0718-381X2011000200010&script=sci_arttext&tlng=en
Soria-Hernández, M. A., Molina, N., & Rodríguez, R. (2008). Hábitos de higiene bucal y su influencia sobre la frecuencia de caries dental. Acta pediátrica de México, 29(1),21-24. Recuperado: http://www.medigraphic.com/pdfs/actpedmex/apm-2008/apm081e.pdf
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